La formación de científicos químicos en Bolivia: Tres oportunidades
El científico en Bolivia
La formación de científicos químicos ha sido puesta en duda en Bolivia de alguna manera particularmente en la cantidad de profesionales formados y por tanto recursos asignados a su formación. Estadísticamente los profesionales formados en ciencias puras son apenas el 0.6% (2015) de los profesionales titulados, y de este valor los químicos somos apenas una fracción, debido a que se desconoce principalmente cuál es la función de un químico en la sociedad, más aún en la sociedad boliviana donde el desarrollo tecnológico y la investigación está tan aislada de las masas populares, y de sus pedestres necesidades.
Una sociedad poco desarrollada como la nuestra donde la industria es prácticamente inexistente, donde los controles de calidad y el desarrollo e investigación de nuevos productos o mejoras simplemente no se hacen, la visibilidad de un científico queda bastante reducida. Solo para tener una idea la inversión del estado en ciencia y tecnología es apenas del 0.3% (2012) y 0.6% (2019) del GDP por habitante, cifra que es muy baja en comparación con países como Estados Unidos donde la inversión por habitante es de 3 dólares (2012) y 6 dólares (2019).
Formar científicos es de gran importancia debido a que somos los encargados de desarrollar una sociedad y hacerla cada vez menos dependiente de la importación y la simple compra de productos hechos y de mala calidad. Por ejemplo, el 60% de las importaciones del país son alimentos que se podrían producir localmente. Los químicos nos dedicamos a buscar en los recursos naturales que disponemos, más elementos de interés que puedan servir de algo a la sociedad no solo nacional sino mundial.
Los problemas actuales como oportunidades
El químico y la calidad: El control de la calidad de los productos tanto producidos como consumidos en el país es muy importante, debido a que un producto de mala calidad simplemente no tiene ningún futuro en mercado alguno, más aún hoy donde la competencia mundial permite adquirir los mismos productos en mejor calidad y precio de diversos mercados.
El químico y la salud: Así también los alimentos consumidos deben ser controlados para asegurar que los consumidores no estarán expuestos a riesgos innecesarios. Los alimentos importados pueden contener sustancias radioactivas, tóxicas o carcinogénicas, como el caso de ingreso de atún contaminado con mercurio el año 2017. El Senasag requirió estudios hechos en Colombia para evaluar la contaminación y no lo hizo de oficio en el país como parte de un control local, acorde a los diarios de la época los lotes contaminados ya habían entrado al territorio nacional y fueron distribuidos. Nuestro país requiere estudios realizados en el extranjero para garantizar la inocuidad que, en caso de un error, los bienes no solo están en el interior de nuestra nación sino también distribuidos y probablemente consumidos.
El químico y la industria: La función del químico es investigar cómo podemos mejorar procesos industriales, con los medios que poseemos y que quizás desconocemos, el desarrollo de nuevos catalizadores en base a los materiales disponibles en nuestro territorio, nos podría hacer menos dependientes y más competitivos en la producción en beneficio de la nación.
Finalmente, la evaluación de los recursos naturales que poseemos como nación debe estar a cargo de científicos. En este campo los químicos se dedican en Bolivia ya hace mucho tiempo a investigar la presencia de principios activos de interés medicinal en las plantas típicas de nuestro territorio, se investigan constantemente las propiedades nutricionales de los alimentos que tenemos y también nuevos materiales para los ámbitos de energía y catalizadores.
Para el estudiante de química estas son algunas de las razones por las que se considera que el profesional químico es importante para la nación. Se requieren institutos de investigación y control de calidad, al ser una ciencia que cubre tantos aspectos del desarrollo, formarse como químico es una gran manera de poder realizar los sueños personales de investigar nuevos productos y sustancias, y al mismo tiempo aportar al desarrollo del país. Tenemos programas para mejorar la visibilidad de la ciencia. ¡Preséntate ya!
Por: Huáscar Andrés Bedregal Salinas Vega, Patricia A. Mollinedo Portugal
pattymollinedo@gmail.com / pamollinedo@umsa.bo
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