Los inversores deberán pasar el día esperando los resultados de Apple, Amazon y Meta.
Ayer, el presidente de la FED, Jerome Powell, fue claro al decir que ningún inversor debería contar con una caída de los tipos de interés americanos en la reunión que el banco norteamericano celebre en marzo, descartando una apuesta que ayudó a impulsar las bolsas en los dos últimos meses. Fue una masacre en los mercados bursátiles, que llevó al índice Nasdaq a caer más de un 2% en la última sesión bursátil de enero.
Vale la pena recordar: ajustar las velas a positivo es un movimiento común en los mercados después de subidas o bajadas muy pronunciadas.
Hoy, deberíamos dedicarlo a reflexionar sobre las novedades de ayer. La agenda es relativamente débil en el extranjero, al menos mientras el intercambio esté abierto.
En Europa, la inflación de la zona del euro se desaceleró al 2,8% en enero, menos que el 2,7%. La cifra indica que el Banco Central Europeo, así como la Reserva Federal, deberían posponer el inicio del recorte de tipos de interés.
En enero, Christine Lagarde, presidenta del BCE, ya había señalado que las primeras reducciones deberían producirse en el verano europeo, es decir, a partir de junio. En EEUU, la apuesta ahora es por los recortes en mayo.
Si los inversores tienen pocas noticias en su radar durante el día, la cosa cambia después del cierre. Los resultados de las grandes tecnológicas en EEUU deberían animar el mercado secundario e indicar la dirección de los mercados bursátiles en febrero. Estamos hablando de Apple, Amazon y Meta (o Facebook, si estás apegado a los nombres originales de las empresas).
Vale recordar que la reacción de los mercados ante las cifras de Microsoft y Google fueron bastante negativas.