Cuatro empresas concentran los vuelos no regulares en todo el país
Cuatro empresas dominan el mercado de las operaciones de vuelos chárter (no regulares) en el país, tres de ellas también ofrecen rutas comerciales. Sin embargo, a casi 19 meses de la tragedia del vuelo chárter 2933 de LaMia, no se realizaron cambios estructurales en la normativa para regular este tipo de operaciones, según especialistas, empresarios y funcionarios públicos consultados por Los Tiempos.
En este sentido, el director ejecutivo de la Dirección General de Aeronáutica Civil (DGAC), Celier Arispe, destacó que BoA, Ecojet y Amaszonas son los principales operadores del mercado -de vuelos chárter en Bolivia junto a la empresa Aeroeste-.
“Son líneas aéreas regulares, ellas tienen la capacidad también para hacer los vuelos no regulares, es decir, chárteres, están de acuerdo a norma, cumplen con todo”, afirmó.
Además, agregó que la compañía de vuelos no regulares, Aeroeste también cumple con los requisitos solicitados por la DGAC, aunque evitó precisar cuántas empresas de este tipo ofrecen estas rutas en el territorio nacional.
“No le voy a dar números, pero son varias. En Santa Cruz tenemos varias empresas que tienen aeronaves que pueden volar encima de cinco horas. Los Caravan (avión utilitario), son taxis aéreos, también ellos pueden, si cumplen con la normativa lo pueden hacer”, sostuvo.
Arispe destacó que tras el accidente de LaMia, la DGAC se propuso impulsar su reestructuración, además se centró en la capacitación del personal aeronáutico. Asimismo, indicó que se enfatizó en el cumplimiento de las normativas que regulan los vuelos chárter, en concordancia con las normas de la Organización de Aviación Civil Internacional (OACI).
Sin embargo, el especialista en derecho aeronáutico, Omar Durán, y el analista de la misma área, Samuel Montaño, cuestionaron las acciones asumidas por la DGAC desde el accidente de LaMia en noviembre de 2016 y sostuvieron que los controles administrativos fueron endurecidos sobre los técnicos.
Por otro lado, advirtieron que estas políticas restringieron las certificaciones para nuevos operadores tanto a nivel regular como no regular, lo que provocó un favorecimiento para las entidades públicas como TAM, BoA y operadores privados chárter que adquirieron su licencia antes del accidente de noviembre de 2016.
Por su parte, Durán indicó que desde 2016 no se modificaron las normas internacionales que se aplican en Bolivia para otorgar permisos a vuelos no regulares ni la ley de Aeronáutica Civil.
“Las únicas situaciones y circunstancias, tal vez las personas que en su momento autorizaban algún vuelo o inspección ya no son dos o una son tres y cuatro, pero después la situación es la misma”, agregó.
Por otro lado, el gerente general de Lloyd Aéreo Boliviano (LAB), Orlando Nogales, afirmó que el endurecimiento en la emisión de permisos de funcionamiento también afecta a los vuelos comerciales.
“No están siendo objetivos en el análisis de la documentación, el tema técnico pasa a segundo plano y el administrativo pasa a tercer lugar, priorizan respaldos financieros”, añadió.
DATOS
Permiso para vuelos chárter demora 2 años. Los especialistas advierten que las solicitudes para los vuelos no regulares pueden demorar entre dos meses a dos años. Según el abogado Omar Durán, se debe solicitar los requisitos formales ante la DGAC para obtener autorización de operaciones chárter. Posteriormente, el requerimiento pasa por el director de seguridad operacional, quien deriva al director general.
Se debe certificar la solvencia financiera. Luego, los solicitantes tienen un plazo de cinco a 10 días para presentar estados de cuenta, aeronaves, trayectoria de pilotos y demás. Después, personal de la DGAC debe visitar e inspeccionar las aeronaves para evaluar si cumple con los requisitos.
En 2017 se registraron 15 aeródromos privados. El director de la Dirección General de Aeronáutica Civil (DGAC), Celier Aparicio Arispe, informó en abril de 2017 se inscribieron 15 nuevos aeródromos privados.
Bolivia reportó siete accidentes en 2018. A mayo de 2018, la cifra alcanza los siete accidentes aéreos en todo el territoro nacional, según la DGAC.
CRECE DEMANDA EN EL ORIENTE POR FACILIDADES
Los departamentos de Beni y Pando se configuraron en un escenario adecuado para el crecimiento de los vuelos chárteres (no regulares), ya que las condiciones geográficas facilitan las operaciones de aeronaves ligeras, explicaron los especialistas aeronáuticos consultados por este medio.
Al respecto, el analista en aeronáutica, Samuel Montaño, definió este tipo de vuelos como “improvisados” para resolver hechos urgentes o extraordinarios.
Por su parte, el gerente general del LAB, aseguró que durante los últimos 10 años se registró un incremento del 15 por ciento, provocado por las condiciones favorables para este nicho de mercado. Entre otros factores, destacó el aumento de afluencia de pasajeros a destinos turísticos “exóticos” como el salar de Uyuni y Rurrenabaque.
Contrariamente, Montaño advirtió que debido a su dinámica se pueden infringir leyes de seguridad aeronáutica para satisfacer la demanda.
“Son pocas empresas las que operan dentro del margen de seguridad como Ecojet y Amaszonas”, agregó Montaño.
Por otro lado, indicó que la ausencia de caminos en regiones de la Amazonía boliviana y las llanuras favorece la construcción de pistas irregulares para fomentar el uso de vuelos chárter. Contrariamente a lo que ocurre en el occidente.