¿Qué significa que Estados Unidos haya perdido la nota AAA?

Reforma
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Calificadoras Fitch, S&P y Moody’s AAA

Fitch Ratings degradó un escalón la calificación de la deuda de Estados Unidos, la mayor economía del mundo, del máximo AAA a AA+.

La calificadora de riesgo atribuyó el recorte a una “erosión de la gobernanza”, luego de los retrasos de las negociaciones en el Congreso sobre el límite de endeudamiento y los acuerdos de último minuto para evitar un default.

¿Qué es la nota AAA?

Para evaluar la solvencia de Estados, comunidades o empresas, las tres principales calificadoras del mundo —Fitch, S&P y Moody’s— usan escalas de letras o notas, que van desde AAA, considerada por encima de cualquier riesgo, a C o D, que señalan posibles incumplimientos de pagos.

Las mediciones se realizan analizando parámetros de crecimiento económico, endeudamiento, déficit, gastos e ingresos fiscales, y el diagnóstico sirve de guía a los inversionistas.

Eso significa también que cuanto más baja sea la nota atribuida, mayores serán los intereses que los inversionistas pedirán para prestar dinero a un Estado o a una empresa, porque su deuda será considerada de mayor riesgo.

¿Qué países conservan​ la triple A?

Sólo un puñado de países conserva la máxima nota de las tres grandes calificadoras:

  • Alemania
  • Australia
  • Dinamarca
  • Luxemburgo
  • Noruega
  • Países Bajos
  • Singapur
  • Suecia
  • Suiza

Otros sólo tienen la mejor calificación en una o dos de las tres grandes agencias de riesgo crediticio.

¿Quién ha perdido la máxima calificación?

En Europa, varios países perdieron la máxima nota después de la crisis financiera de 2008.

En 2011, S&P despojó a Estados Unidos de su nota AAA después de una extensa pugna en el Congreso sobre el límite de endeudamiento, pero Moody’s, que tiene registros desde 1949, le sigue otorgando la nota máxima.

Estados Unidos necesita resolver la recurrencia de los problemas ligados a su límite de emisión de deuda y encontrar soluciones de largo plazo si quiere recuperar la AAA, declaró en CNBC Richard Francis, analista de Fitch.

¿Cuáles son las consecuencias?

La pérdida de la triple A envía una señal a los mercados, que por el momento es sobre todo simbólica, dado que Estados Unidos sigue teniendo una buena nota y sus bonos siguen siendo considerados como los más seguros y líquidos del mundo.

La tasa de rendimiento del bono del Tesoro a 10 años, una referencia para el mercado, rompió por tercera vez en el año la barrera de 4 por ciento antes del anuncio de Fitch, pero volvió a pasar por debajo de ese nivel inmediatamente después.

Las tasas de esos bonos son el rendimiento que ofrecen o el interés que paga el Tesoro por endeudarse. La presión al alza de los últimos meses se debe ante todo al aumento de las tasas de referencia de la Reserva Federal (Fed), el banco central de Estados Unidos.

La Fed ha aumentado sucesivamente sus tasas de interés en un intento por encarecer el crédito y enfriar así el consumo y la inversión, y con ello contener la presión sobre los precios en un contexto de inflación elevada.

El dólar operó con una leve alza frente al euro un día después de la acción de Fitch, ya que la divisa estadounidense sigue siendo un valor refugio. El índice del dólar, una medida del billete verde frente a seis pares, subió 0.57 por ciento.

“El dólar estadounidense es la moneda de reserva más importante del mundo, lo que da al Gobierno una flexibilidad de financiamiento extraordinaria”.

Fitch

La calificadora acotó lo anterior en sus conclusiones, lo sugiere que Estados Unidos va a seguir encontrando con comodidad compradores para su deuda.

La economía estadounidense es sólida y la tasa de desempleo está debajo de 4 por ciento, pero el déficit público está en vías de llegar al 6 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB) en el actual ejercicio fiscal, señalaron por su parte analistas de Capital Economics.

Según esta consultora, los costos de los intereses de la deuda del Gobierno pueden duplicarse en los próximos años, aunque mucho dependerá de la capacidad de la Fed para iniciar rápidamente un ciclo de recortes de sus tipos de interés.

Si eso no ocurre, “entonces la dinámica de la deuda puede volverse rápidamente insostenible”, advierte el informe.