UE ve pocos avances con China para evitar aranceles a vehículos eléctricos
El gigante oriental aún no ha cumplido los estrictos requisitos de la UE para garantizar que cualquier acuerdo sea aplicable y tenga el mismo efecto que los aranceles antisubvenciones.
La Unión Europea solo ha visto avances limitados en las últimas semanas en las negociaciones con China sobre un acuerdo integral para reemplazar los aranceles a los vehículos eléctricos, según personas familiarizadas con el asunto.
China y la UE prosiguen las negociaciones técnicas tras las conversaciones mantenidas en Pekín previamente este mes, en las que ambas partes anunciaron algunos avances. Sin embargo, no han cambiado mucho las cosas desde entonces y el acercamiento entre ambas partes ha sido mínimo, según estas personas, que hablaron bajo condición de anonimato porque las deliberaciones son privadas.
China aún no ha cumplido los estrictos requisitos de la UE para garantizar que cualquier acuerdo sea aplicable y tenga el mismo efecto que los aranceles antisubvenciones que el bloque adoptó el mes pasado, añadieron estas personas. Los Estados miembros tampoco han sido informados de ningún avance significativo, según un diplomático familiarizado con la situación.
Las partes han estado explorando un acuerdo sobre los llamados compromisos de precios, un complejo mecanismo para controlar los precios y los volúmenes de las exportaciones, utilizado para evitar los aranceles. Bruselas y Pekín también siguen discrepando sobre la posibilidad de acuerdos individuales con fabricantes de automóviles, incluidas las empresas europeas que tienen empresas conjuntas con empresas chinas.
La UE sostiene que tales acuerdos cumplirían las normas de la Organización Mundial del Comercio, mientras que Pekín insiste en negociar un acuerdo global dirigido por un organismo comercial chino. Las conversaciones con un pequeño grupo de fabricantes europeos de automóviles con empresas conjuntas en China continúan, según las personas citadas.
Portavoces de la Comisión Europea declinaron hacer comentarios.
Las conversaciones se han centrado principalmente en el establecimiento de un mecanismo de comunicación entre Bruselas y Pekín, así como en evitar el riesgo de la llamada compensación cruzada, por la que cualquier precio mínimo de importación de vehículos eléctricos se compensa con las ventas de otros bienes, como vehículos híbridos y accesorios, informó Bloomberg anteriormente.
La UE adoptó el mes pasado aranceles definitivos adicionales de hasta el 35%, que se suman a los ya existentes del 10% y se mantendrán durante los próximos cinco años si no se llega a un acuerdo alternativo. China ha amenazado con responder a los gravámenes de los vehículos eléctricos con aranceles propios sobre los productos lácteos, la carne de cerdo y el brandy. El lunes, la UE solicitó consultas a la Organización Mundial del Comercio sobre las medidas chinas relacionadas con el brandy.