Brasil ahonda su crisis con récord de 90.303 contagios diarios
Brasil registró el miércoles 90.303 nuevos casos de coronavirus, un nuevo récord, un día después de que el país informó de un nuevo máximo de muertes diarias relacionadas con el virus.
Las infecciones suman ahora 11.693.838 y las muertes aumentaron en 2.648 a 284.775, tras el récord reportado el martes.
Estas cifras se dan luego de que el Presidente Jair Bolsonaro designara a su cuarto ministro de Salud durante la pandemia.
Marcelo Queiroga, el nuevo secretario de Estado, más temprano dijo que el Mandatario le asignó la misión de unificar la lucha del país contra el coronavirus.
Queiroga no proporcionó detalles de cómo sería ese enfoque, pero habló de la importancia del uso de mascarillas y el distanciamiento social, en una aparente desviación de la ridiculización que ha hecho Bolsonaro del uso de cubrebocas y de las medidas de cuarentena.
“La misión que recibí es unificar el esfuerzo nacional para combatir la pandemia”, declaró Queiroga en una conferencia de prensa en Río de Janeiro.
“Reduciremos las muertes con dos enfoques principales. En primer lugar, con políticas de distanciamiento social que reduzcan la circulación del virus, en segundo lugar con una mejor capacidad de atención en nuestros hospitales”, agregó.
Queiroga habló en un acto con motivo de la entrega de las primeras dosis de la vacuna AstraZeneca contra el Covid-19 producida en Brasil, con principios activos importados. Esta semana se entregarán más de 1 millón de dosis, dijeron autoridades.
El presidente Bolsonaro ha sido ampliamente criticado por su manejo de la pandemia. El mandatario se ha mofado de las medidas para la contención del virus y promovido remedios no probados como la hidroxicloroquina.
No está claro si Queiroga, un cardiólogo respetado, logrará cambiar el rumbo y controlar una epidemia en espiral. El martes, Brasil registró un número récord de muertes diarias de 2.841.
Una nueva encuesta de opinión realizada por Datafolha mostró que el 54% de los encuestados considera el manejo del presidente de la crisis de COVID-19 como malo o muy malo, el más alto de cualquier momento durante la pandemia.