El último mensaje de la tripulación del sumergible Titán antes de descender al Titanic

Por Redacción dat0s con Agencias
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sumergible Titan

La Guardia Costera de EEUU inició este lunes una semana de audiencias públicas para aclarar detalles de la implosión del vehículo de OceanGate.

Este lunes 16, la Guardia Costera de Estados Unidos inició una semana de audiencias públicas para esclarecer los detalles de la implosión del sumergible Titán, ocurrida en junio de 2023, durante una expedición al lugar donde se encuentran los restos del Titanic. Durante la sesión, los expertos mostraron el último mensaje de texto enviado por los miembros de la tripulación antes de perder el contacto.

Al barco de apoyo Polar Prince, se le preguntó si el Titán todavía podía ver el barco en la pantalla de abordo y si todo estaba bien, la tripulación respondió mediante un mensaje: “aquí todo está bien”.

La embarcación utilizó equipos de Internet de Starlink, la empresa de Elon Musk, para mantener contacto con un barco en la superficie, pero esta conexión se perdió pocos minutos después cuando el vehículo ya se encontraba a una profundidad aproximada de 3.300 metros. Según el cofundador de la empresa, Guillermo Söhnlein, en caso de pérdida de contacto, el vehículo debería regresar a la superficie, pero esto no sucedió.

La audiencia de este lunes también abrió espacio para revelaciones como el hecho de que el sumergible nunca pasó por una revisión técnica externa a OceanGate, empresa responsable de su construcción. El primero en testificar, Tony Nissen, ex director de ingeniería de la compañía, afirmó que había “100%” de presión para poner el barco en el agua a pesar de posibles problemas.

Nissen dijo que se negó a pilotear el Titán en una misión anterior debido a preocupaciones de seguridad y de la tripulación.

Afirmó que impidió que el sumergible se dirigiera hacia los restos del Titanic en 2019.

“No voy a entrar en eso”, dijo el cofundador de OceanGate, Stockton Rush, en ese momento. Nissen fue despedido ese año.

El Titán implosionó el 18 de junio de 2023, matando a Rush y a otras cuatro personas a bordo y provocando un debate global sobre el futuro de la exploración submarina privada.