El 8 de junio, Jerad y Amanda Miller decidieron que había llegado el momento de iniciar una revolución contra el Gobierno de los Estados Unidos. Su primer golpe no fue dirigido contra el presidente del Congreso, sino contra dos oficiales (Alyn Beck e Igor Soldo) de la policía de Las Vegas en el momento que apuraban su almuerzo en una pizzería. No se dieron cuenta de que habían sido elegidos como los primeros blancos de una revolución, hasta que los Miller abrieron fuego contra ellos a quemarropa y fue demasiado tarde para defenderse. Luego de despojar a ambos oficiales de sus armas y municiones, se informa que los Miller prendieron una nota en las ropas de uno de ellos, declarando que la revolución ha-bía comenzado. De acuerdo al “Las Vegas Sun”, también cubrieron los cadáveres de ambos policías con una bandera Gadsen y dejaron una esvástica en uno de ellos. A medida que abandonaban el restaurante, los testigos escucharon que gritaban consignas sobre el inicio de la revolución. Los Miller no dispararon contra los propietarios del restaurante: su objetivo se concentraba en las autoridades.
De la pizzería, los Miller cruzaron caminando la zona de parqueo e ingresaron a un Wal-Mart donde se informa que Jerad Miller disparó un tiro al aire y ordenó a los clientes que abandonaran el edificio, advirtiendo a gritos que la policía estaba por llegar. Uno de ellos que portaba un arma de fuego, (Joseph Wilcox), trato de enfrentarse a Jerad y terminar así el incidente, pero el Buen Samaritano aparentemente no se dio cuenta de que Amanda operaba con aquel y cayó asesinado a tiros por la mujer.
Los Miller se atrincheraron en un rincón del almacén detrás de mostradores y mercaderías y se informa que el numeroso grupo de policías encargado de controlar la situación, los confrontó e hirió, ayudándose con el sistema de cámaras del almacén para dirigir a un grupo SWAT a la posición que ocupaban los Miller. Se informó asimismo, que Amanda Miller disparó varias veces contra Jerard e inmediatamente después, se disparó a sí misma en la cabeza, concluyendo trágicamente su revolución plagada de odio.
Los Motivos
Mientras algunos medios de prensa los describen como extremistas neo-nazis de derecha, una investigación de los antecedentes sociales de los Miller, nos conduce a una figura bastante más compleja sobre su ideología y sus motivaciones. Observados desde el punto de vista de sus antecedentes sociales y de sus apariciones en los medios, los Miller participaron en una bien publicitada campaña entre la Agencia de Administración Territorial y manifestantes armados del Rancho Bundy en el Condado de Clark del Estado de Nevada. Jerad Miller colgó asimismo en su cuenta de Facebook, teorías sobre supuestas conspiraciones de manipulaciones químicas, procesos de vacunación y un número de asuntos “patrióticos” referidos a la interpretación casi literal de la Segunda Enmienda, al mismo tiempo que colocaba en su sitio “USAPatriotasVerdaderos” del canal You Tube, un video donde afirma que toda acción de gobierno es nefasta. En otros videos, explica que debe permitirse a los ciudadanos, utilizar cualquier substancia para drogarse y “perseguir la felicidad”, admitiendo que él mismo era un traficante de mariguana. En marzo de 2013, Jerard Miller también subió un video a su sitio en You Tube, quejándose de que la policía lo había arrestado y había invadido su departamento para confiscar las armas de su esposa. (Como convicto de un delito grave, Jerad Miller no podía estar en posesión de armas de fuego y la compra de ellas por parte de su esposa bajo su acuerdo nupcial, es considerada una violación de esa ley en la mayoría de las jurisdicciones). En su cuenta de Facebook, Amanda Miller colocó fotografías de Jerad y de ella misma, participando en la Marcha Anónima del Millón de Mascaras, llevada a cabo en Lafayette, Indiana, el 5 de noviembre de 2012.
En lugar de extremistas de derecha, la pareja se definiría mejor como libertarios anarquistas anti-autoridad con una desconfiada actitud tanto hacia las tendencias izquierdistas sobre la legalización de drogas, como contra las posiciones derechistas referidas a la Segunda Enmienda. En los asuntos colocados por Jerad Miller en sus cuentas de You Tube y Facebook, critica el espectro total del establecimiento político de los Estados Unidos, incluyendo a liberales, conservadores, cristianos y fascistas por igual. Un análisis de las posturas de Jerad Miller, devela claramente que en realidad quería iniciar una revolución para romper todo el sistema en general; es posible que por esta razón dejó la esvástica en el policía muerto, para simbolizar que la policía también es fascista y no para indicar que los Miller tenían inclinaciones neo-nazi-fascistas.
El 2 de mayo de 2014, Jerad Miller en su cuenta de Facebook, resumió así sus motivaciones:
“No hay causa más grande que morir por la libertad. Morir por dicha causa es fácil; vivir por ella es otra cosa. En un sentido, la muerte es la liberación de la tiranía. La muerte es una salida fácil; más apropiadamente, es la rutina ‘del suicidio por policía’. Sí; enfrentarse a los déspotas es peligroso y probablemente no termine bien. Yo lo sé, mi esposa lo sabe. Muy pronto vendrán por nosotros porque no les gusta lo que pensamos ni lo que decimos. No les gusta el hecho de que nosotros simplemente no nos subordinaremos a la regla fascista. No tenemos mucho, pero estamos dispuestos a sacrificarlo todo…por ustedes… por su libertad, incluso si ustedes no nos dejan tener la nuestra. Nosotros sabemos quiénes somos y qué queremos…lo saben ustedes?”
Las lecciones aprendidas
La mayoría de los videos de Jerad Miller en You Tube, son errantes y desordenadas peroratas en las que parece haber sido influenciado por las drogas. De la secuencia de eventos del 8 de junio, parece ser que sus intentos de iniciar una revolución, fueron planificados y llevados a cabo de manera muy similar a sus videos, aunque no queda claro por qué asumieron que podían hacerse fuertes contra la policía, encerrándose sin rehenes, dentro de un local de Wal-Mart. Posiblemente, su desilusión se incrementó a medida que crecía su exposición a películas de acción hollywoodenses o a guerreros de video juego en los que una sola persona, puede contener a todo un ejército. Posiblemente pensaron asimismo, que con comida, agua y municiones, podían resistir la respuesta de la policía; sin embargo, sea cual fuere la razón de esa equivocada interpretación, las cosas no podían salir bien para la pareja desde el momento que decidieron enfrentarse a tiros con la policía, pactando cometer suicidio antes que rendirse.
Aún así y a pesar de la ingenuidad de su planificación y ejecución, las Miller fueron capaces de lanzar un ataque terrorista domestico que tomó las vidas de dos policías y de un civil. Su ataque sirve como un recordatorio de que el terrorismo doméstico es una amenaza persistente en los Estados Unidos, aun cuando sus protagonistas parezcan inestables o megalómanos. (La matanza del 4 de junio de tres oficiales de la Policía Montada Canadiense en Moncto, Nueva Brunswick, nos muestra que este tipo de violencia contra la autoridad, no es sólo un problema de los Estados Unidos).
Este caso es también un trágico recordatorio para que los defensores de la ley, ejerzan una adecuada atención situacional cuando están de uniforme e incluso cuando están fuera de servicio.
Aunque el terrorismo doméstico constituye una amenaza constante, tiende a constituirse en una de baja intensidad. Sin que importen sus preferencias ideológicas, la mayoría de los perpetradores tienden a actuar como los Miller, operando en solitario o en pequeños grupos; carecen asimismo, de la capacidad para planificar y ejecutar ataques sofisticados o extraordinarios y por el contrario, perpetran ataques de baja intensidad con bombas o asaltos armados contra objetivos fáciles. Los terroristas domésticos que están en condiciones de ejecutar ataques con gran número de bajas como aquellos orquestados por Timothy MacVeigh o Anders Breivik, constituyen la excepción más no la regla y aun así, tales ataques no lograron encender la mecha de las revoluciones que pretendieron provocar.
Debido a ello y en muchas formas, las implicaciones de las amenazas de terroristas domésticos, son esencialmente las mismas que las amenazas fundamentalistas jihadistas. Entonces, es crítico que la policía y el público recuerden que los ataques terroristas, no aparecen de la nada. Los individuos que planifican un ataque —sin que importe su motivación ni ideología— siguen u observan un ciclo discernible, ciclo que contiene puntos en los que el ataque puede ser detectado y evitado antes de que se produzca. Por cierto que los Miller condujeron vigilancia pre-operacional de la pizzería, antes de realizar su ataque y no sería sorpresivo que los investigadores descubran que la pareja hubiera conducido una visita ocular a la tienda de Wal-Mart en la que se atrincheraron. Informes de prensa, indican asimismo que anunciaron su plan a una amiga y vecina que no les creyó y no lo notificó a la policía. “Si ves algo…di algo”, reza el principio que también se aplica al terrorismo interno y no únicamente a las amenazas jihadistas.
Al respecto, el arresto de Jerad Miller en marzo de 2013, fue calificado como el de un delincuente que portaba armas de fuego. No pudimos averiguar la conclusión de ese caso ni las razones de abandonar Indiana para no ir a prisión por la felonía de haber sido arrestado en posesión ilegal de armas y pese a que las autoridades que monitoreaban el caso del Rancho Bundy lo procesaron por su historial criminal, debieron haber descubierto rápidamente su identidad como la de un delincuente en posesión de armas de fuego en razón precisamente, al armamento que llevaba consigo en esa ocasión.
Es asimismo importante que todos entendamos, la imposibilidad física del Gobierno para proteger todos los blancos u objetivos potenciales de toda clase de ataques, incluyendo a los propios defensores de la ley. Si las actividades pre operacionales de potenciales perpetradores no fueran detectadas, sus probabilidades de ejecutar un ataque y de matar o lesionar gente, son muy altas incluso si se trata de personas no entrenadas y aun si sus planes no hubieran estado bien pensados.