Exdirector Fondioc: Bartolinas impusieron hasta su chofer

El exdirector Ejecutivo del Fondo de Desarrollo Indígena Originario Campesino (Fondioc), en proceso de liquidación, Marco Antonio Aramayo Caballero, confirmó a Erbol que esa entidad estatal fue cuoteada por dirigentes de las organizaciones campesinas e indígenas, miembros del Directorio, que actualmente apoyan la reelección del presidente Evo Morales. Incluso, aseguró que las “Bartolinas” le impusieron hasta su chofer.

Aramayo, quien dirigió el exFondioc de 2013 a 2014, recordó que cuando fue designado ya se conocían denuncias de malos manejos en la administración de esa instancia, por lo que planteó el cambio del personal.

Sin embargo, el Directorio, compuesto por organizaciones campesinas, Bartolinas, colonizadores (interculturales) e indígenas, todas aliadas al gobierno del Movimiento Al Socialismo (MAS), y presidida por la exministra Nemesia Achacollo, aprovecharon el cambio para contratar a su gente en las distintas direcciones.

“Cuando ya cambiamos al personal administrativo, las organizaciones se lo cuotearon. Los dirigentes ponían a los técnicos, ponían a los jefes, a los directores, a los técnicos, incluso mi chofer fue impuesto por las Bartolinas, mi chofer no era de mi confianza, hasta ahí llegaba la imposición de las organizaciones”, aseveró Aramayo.

El exejecutivo, que cumple detención preventiva hace más de cuatro meses en la cárcel de San Pedro de la ciudad de La Paz, tras ser denunciado por la interventora del exFondioc por supuestos delitos de incumplimiento de deberes, contratos lesivos al Estado y conducta antieconómica.

Directorio

El Directorio del Fondo Indígena estaba compuesto por la Confederación Sindical Única de Trabajadores Campesinos de Bolivia (CSUTCB), la Confederación Nacional de Mujeres Campesinas Indígenas Originarias de Bolivia – “Bartolina Sisa” (CNMCIOB-“BS”), la Confederación Sindical de Comunidades Interculturales de Bolivia (CSCIB), el Consejo Nacional de Ayllus y Markas del Qullasuyu (CONAMAQ) de Hilarión Mamani y la Confederación de Pueblos Indígenas de Bolivia (CIDOB) de Melva Hurtado. Además de las regionales: Asamblea del Pueblo Guaraní (APG), la Central de Pueblos Étnicos de Santa Cruz (CPESC) y la Coordinadora de Pueblos Étnicos Mojeños del Beni (CPMB).

Actualmente las primeras cinco organizaciones nacionales continúan en el nuevo Fondo de Desarrollo Indígena, como miembros del Consejo Consultivo, junto a otros seis ministerios. En tanto, las organizaciones indígenas departamentales fueron excluidas. Las confederaciones conforman el denominado Pacto de Unidad, un frente de defensa de la gestión del presidente Evo Morales, asimismo apoyan la repostulación del Jefe de Estado para las elecciones de 2019, con el objetivo de lograr otra reelección (un cuarto mandato consecutivo).

Marco Antonio Aramayo también hizo conocer que los dirigentes de las ochos organizaciones recibieron en 2014, 3.9 millones de bolivianos para el monitoreo y cierre de proyectos productivos que se encontraban retrasados, con autorización de la exministra Achacollo. Sin embargo, se desconoce su inversión porque la entidad fue intervenida por el gobierno a inicios de este año.

El exdirector del Fondo pidió que los dirigentes de esas organizaciones sean investigados por éstas y otras irregularidades. Indicó que fue traicionado por todas y cada una de ellas porque solo acató las determinaciones que adoptaron y ahora, observó, que la liquidadora Lariza Fuentes sólo investigue a los exdirectores ejecutivos (Elvira Parra y Daniel Zapata).

“Hay que preguntarles a las organizaciones cuántos proyectos cerraron ellos como control social con esos recursos (Bs3.9MM), como garantes del Fondo Indígena (…) Yo como director cumplí estrictamente todos los procedimientos, esos proyectos al igual que todos los otros proyectos los aprobaban el Directorio, los directores de área y yo solicité el presupuesto y la (ex)ministra (Nemesia Achacollo) autorizó su financiamiento”, puntualizó.