Periodista de CNN habla sobre Bolivia y Evo Morales

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Foto: El Deber

Carlos Montero Fernández, es uno de los rostros más importantes de CNN en español. Llegó por primera vez a Santa Cruz de la Sierra para presentar los productos de Turner Broadcasting. Dialogó con EL DEBER sobre su mirada a Bolivia y al presidente Evo Morales

 

La primera impresión que deja es de mucha calidez y sencillez. Carlos Montero es el dueño de las mañanas de la cadena CNN en español y uno de los rostros más conocidos porque lleva casi 20 años trabajando en esa corporación de noticias que se ve en el continente latinoamericano. Con una camisa guayabera, un pantalón claro y una gran sonrisa, apareció en el lobby del hotel Los Tajibos y caminó junto con los periodistas hasta el salón del club ejecutivo. 

Se ubicó al lado de la ventana y comenzó el diálogo abierto y franco, sin restricciones y con una agenda abierta. Publicamos el capítulo referido a Bolivia. Su mirada sobre el rol de los medios en las elecciones de EEUU podrá ser leído en el suplemento Séptimo Día el domingo. Fue su primera visita a Santa Cruz, pues ya antes estuvo en La Paz y entrevistó al presidente Evo Morales. 

Tu presencia está vinculada esta vez a los negocios, al aterrizar Turner Broadcasting en Bolivia y presentar una oferta para que las empresas nacionales publiciten en los 16 canales de la empresa
Me invitó la gente de Turner, que son los dueños de CNN, y van a presentar los distintos canales que tiene Turner. Se invita a empresarios, Gobierno, etc. para presentar nuestros productos.

¿Eso implica una mirada atractiva en cuanto a posibilidades de negocios?
Es un mercado importante para nosotros, no tanto por la cantidad de suscriptores, sino por lo que se invierte en nuestra cadena. Es un país que ofrece mucho, una audiencia a la que le interesa CNN en español y los otros canales de Turner.

¿Esa mirada tiene que ver con la situación económica de Bolivia?
El Washington Post describió la situación económica de este país como “el milagro boliviano”, por cómo llegó a tener un crecimiento mayor al 6%. El desafío del Gobierno es que la distribución sea más equitativa, como lo prometió Evo Morales, que tiene un Gobierno progresista y muy crítico de Washington, pero hasta EEUU reconoce que económicamente el presidente Morales está haciendo las cosas bien.

¿Cómo ves a Bolivia?
Veo que está en un momento interesante, de transición, porque en las elecciones pasadas ganó el presidente Morales abrumadoramente. Estaba la gran duda de si él se podría perpetuar en el poder y el que decidió en las urnas fue el boliviano que le dijo que no, y me parece que eso es sano en cualquier democracia. 

Ahora hay que ver qué sucede con esta oposición que estaba tan debilitada, cómo se prepara para las elecciones y también el movimiento del presidente Evo Morales, quién va a ser su sucesor, qué piensan hacer, cuál será el próximo paso político de este país. Entonces es un momento de transición, que es un tema que le interesa al resto de Latinoamérica, también por la coyuntura que se está viviendo, en la que muchos gobiernos que eran progresistas de izquierda dieron un giro hacia la derecha.

El Gobierno habla del presidente Morales como de un gran líder internacional. ¿Se lo ve así desde fuera?
Se lo ve desde fuera como una figura a la que se respeta lo que logró: fue el primer presidente indígena, fue víctima de mucha discriminación, cómo pudo avanzar y trató de defender los derechos de los indígenas en su país y, dentro de todo, por la situación económica de Bolivia, hizo sus deberes.

Después está el tema en cuanto a estar tanto tiempo en el poder, si surge algún tipo de rasgos autoritarios, de cómo trata a la oposición o a los medios que están en contra del Gobierno o de las políticas, pero ese es un tema que no solamente sucede en Bolivia, sino también en otros gobiernos de la región. Pero que ganó democráticamente y que hizo las cosas bien en economía, eso está a la vista.

Ha habido episodios de roces entre CNN y el Gobierno de Bolivia. ¿Cómo se ve esta situación desde CNN?
Es un tema que a nosotros nos preocupa muchísimo, porque es la opinión de un presidente. En mi caso personal, yo tuve la oportunidad de entrevistarlo hace dos años. Él fue totalmente abierto, no puso ningún tipo de restricciones sobre lo que podía preguntar. Fue muy cordial conmigo. Después hubo incidentes que sucedieron con la cadena y que la cadena los analiza individualmente, caso por caso.

Y en el caso del supuesto hijo del presidente, ¿cuál ha sido el análisis?
El tema es específico. Yo manejo la mañana y Fernando del Rincón tiene su programa en la noche, pero estoy al tanto de lo que sucedió. Fernando hizo una aclaratoria. Eso fue un incidente y cómo se manejó está bajo investigación de la cadena, la cadena se lo ha tomado en serio. Nunca salió al aire nada sobre ese tema. Eso te demuestra que hay control dentro de la cadena cuando algo no cuadra. La mejor respuesta es la explicación de Fernando (del Rincón).

¿Quedó alguna lección aprendida de este incidente?
Aprendés de cada caso. Lo que me gusta de CNN es que es muy rigurosa en cuanto a la información, cómo se maneja, cuántas fuentes tenemos. Tenemos que ser muy rigurosos y respetuosos de lo que se saca al aire, porque son 20 años de credibilidad de la CNN.

Tenemos que estar atentos a las banderas rojas cuando algo no cuadra y tomarnos el tiempo para investigar más. Antes nosotros tratábamos de ser los primeros, eso hoy en día es imposible. Lo que tenemos nosotros es la credibilidad, por eso hay mecanismos muy rigurosos en el manejo de la información. Somos muy cuidadosos. Pero a veces, pasan cosas.

Si CNN quisiera entrevistar al presidente Evo Morales ahora, ¿sería fácil lograr una entrevista?
No intenté entrevistarlo en este momento, pero hace dos años, cuando estaba acá, hablamos con él, me permitió entrevistarlo y también hacer un especial. Queríamos ver el lado humano y hasta hablamos de fútbol. No sé si se está intentando entrevistarlo. En mi experiencia personal no tuve ningún problema.

¿Cuál es la línea con la que CNN ve a los países del continente?
Tenemos una ventaja que también es una desventaja: salir desde EEUU. La ventaja es que a veces desde lejos las cosas se ven más claras. Dentro de un país, a veces el papel del periodista entra en debate, cuando es militante que más que informar defiende la ideología de un gobierno o que defiende otros intereses. 

La ventaja de CNN es que nosotros no tenemos ninguna relación ni con los gobiernos de turno ni con los intereses económicos poderosos. Mucha gente nos busca a nosotros para hallar esa información que desde fuera no llega a estar contaminada por la coyuntura interna que se maneja.

Al salir desde EEUU, hay gobiernos que dicen que somos ‘proyanquis’, pero no tenemos ninguna relación con ningún gobierno de EEUU, ni recibimos directivas del Departamento de Estado. Nosotros manejamos la idea que tuvo Ted Turner, de debernos a la noticia.