¿Renuncia de Evo, balotaje o anulación? Las opciones de la oposición boliviana

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Foto: Los Tiempos

El conflicto por el presunto fraude electoral tiene movilizada a la oposición boliviana, pero con diferentes matices. Mientras un sector pide la renuncia del presidente Evo Morales, otro apuesta por una salida electoral con una segunda vuelta, mientras que también se planteó la anulación de las elecciones y la convocatoria a un nuevo proceso electoral.

Las elecciones del 20 de octubre dieron por ganador al binomio del Movimiento Al Socialismo (MAS), Evo Morales-Álvaro García Linera, con 47,08% frente a 36,51%de la dupla de Comunidad Ciudadana (CC), Carlos Mesa y Gustavo Pedraza. La diferencia de 10,57% evitó que el actual mandatario enfrente a Mesa en una segunda vuelta, pero la oposición denunció fraude electoral, por lo que comenzó una serie de movilizaciones desde el 22 de octubre.

La posición inicial fue que se debería ir a una segunda vuelta, pero a medida que pasaban los días se presentaron diversas denuncias de fraude, entre ellas, la de Edgar Villegas, que encontró más de mil actas con fallas y alteraciones.

El candidato Carlos Mesa refirió que, ante las denuncias de evidente fraude, se decidió exigir la renuncia de los vocales del Tribunal Supremo Electoral (TSE) y elecciones nuevas. La posición inicial era exigir la segunda vuelta.

El Comité Cívico Pro Santa Cruz, liderada por Luis Fernando Camacho, si bien exigió en primera instancia la segunda vuelta, tras las denuncias de fraude, pidió la renuncia del Presidente, la anulación de las elecciones, nuevos comicios y la renuncia del

TSE. Camacho dijo que llevaría personalmente la carta de renuncia para que Morales la firme y prometió que la “Biblia volvería al Palacio”.

Esta postura fue compartida por el Comité Cívico de Potosí. Marco Pumari, que participó de los cabildos de Santa Cruz, dijo que la renuncia de Morales viabilizaría una salida pacífica en el país.

Pumari, junto al Comité Cívico de Chuquisaca y el de Tarija, conformaron, el pasado 29 de octubre, el bloque cívico del sur del país. En esta reunión se definió el cerco a La Paz, la renuncia de Morales y del TSE.

El bloque realizó un cabildo en La Paz, donde se ratificaron las medidas mencionadas, pero se diferenció en que la elección debería realizarse “sin Evo Morales y sin Carlos Mesa”.

De este evento no participaron Mesa ni el Consejo de Defensa de la Democracia.

El líder cívico de Chuquisaca, Rodrigo Echalar, junto a un grupo cívico de Cochabamba, cuestionaron la posición del líder cívico cruceño, a quien señalaron que “divisionista” y de buscar protagonismo “porque nos está queriendo llevar a una derrota con una carta”.

Ese sector asegura que la mejor forma de terminar el problema es una masiva marcha a La Paz desde todos los departamentos.

La principal crítica fue porque Camacho dio un plazo de 48 horas a Morales para que presente su renuncia, pero, culminado el plazo, aseveró que llevaría personalmente una carta a La Paz.

“Llama a otra reunión con personas no legítimas y plantea otra estrategia. Pone un plazo de 48 todo altanero y su estrategia era mandar una carta. ¿Qué se va a lograr con una carta? Evo la va a tirar al basurero”, sostuvo Echalar.

 

DOS BLOQUE SE DISPUTAN LIDERAZGO

En Cochabamba, dos bloques se disputan el liderazgo de la movilización contra el fraude electoral, que los últimos días han movilizado a miles de personas. Por un lado, está el Comité Cívico Popular, conformado por el Magisterio Urbano, el Sindicato de Ramas Médicas y Afines (Sirmes), gremiales y universitarios de tendencia trostkista. Este sector realiza los cabildos en la plaza 14 de Septiembre.

El otro bloque está conformado por colectivos ciudadanas, Fuerza Kochala, Plataformas Unidas y otros sectores, que generalmente hacen los cabildos en la plaza de las Banderas. Ambos plantean la anulación de las elecciones, pero difieren en la participación de Evo y Mesa.