Un estudio establece que la contaminación del río Katari crece a la par de la urbanización
La contaminación en la cuenca del río Katari “expresa las consecuencias del acelerado, desordenado y desigual proceso de urbanización” en los municipios asentados en su curso, pero en particular de El Alto, afirma el investigador Carlos Revilla H. en un estudio que revela las desigualdades socioecológicas entre los municipios tributarios del lago Titicaca.
El trabajo se encuentra en el texto denominado: “¿Somos nosotros mismos? Desigualdades socioecológicas y urbanización en la cuenca del río Katari”, desarrollado en el marco de los estudios de las desigualdades y la pobreza multidimensional concretados por el Centro de Estudios para el Desarrollo Laboral y Agrario (CEDLA), con el apoyo de la Embajada de Suecia.
Los resultados de este estudio se presentarán en el evento virtual de diálogo: “Situación ambiental y causas de las desigualdades socioecológicas en la cuenca del río Katari”, este 4 de mayo a las 17.00. Contará con la participación de Luis Flores, de la comunidad de Tiquipa (Chojasivi), Xavier Lazzaro (Instituto de Investigación para el Desarrollo – IRD), Guido Alejo Mamani (investigador independiente) y Silvia Escóbar (investigadora del CEDLA).
Según un boletín de prensa, el trabajo identifica la existencia de una desigualdad socioecológica, entre los habitantes y las poblaciones de la cuenca Katari, a raíz del vínculo entre la expansión urbana y la explotación de los recursos naturales de la cuenca y sus efectos en la degradación del medio ambiente.
Según el Censo de Población y Vivienda de 2012, El Alto y Viacha concentran a la mayor parte de la población urbana de la cuenca Katari, la que en los 9 municipios del estudio alcanzaba a 915.646 habitantes, frente a 105.896 en el área rural.
En ese mismo año se reporta a El Alto con el 99,8% de su población urbanizada, Viacha con el 78%, Collana reporta el 56,4% y Colquencha, el 31,2%. Los otros cinco municipios se presentan como rurales, con población dispersa.