20 años de transformación

Hace 20 años a nadie se le pasaba por la cabeza que se hable de Metadatos ni de los campos reservados a la tecnología digital. Hace 20 años a nadie se le habría pasado por la mente que un topo desvele los datos de un Estado poderoso para que el mundo conozca el grado de control que ejerce. La información abruma a millones de seres humanos en el planeta. Ya nadie encuentra interés ni satisfacción cotidiana sin la conexión a internet. Nos ha pasado a todos. La ansiedad es el agotamiento de décadas de evolución que ha dado pie a una Comunidad Inteligente que vigila todo, dónde estamos, por qué estamos, con quiénes nos rodeamos, cuáles son nuestros gustos y preferencias. Vivimos en un mundo vigilado en la “era digital”.

Las diferencias han rebasado el entendimiento. Hace 20 años nadie hubiera imaginado Silicom Valley ni Burning Man; hace 20 años nadie hubiera pensado que el poder de un solo hombre sea más que un Estado; tenga almacenados los registros de todos los habitantes del planeta. El fruto de esta revolución tecnológica dio surgimiento a los Millenialls. Facebook es el ensamble de esa generación por sus particularidades homogenizadas. Los que vienen y los que han nacido en medio de la tecnología G5 se enfrentarán a similares campos de acción; que los intereses de las mayorías no pueden esperar mucho más si el mundo no se propone equilibrios y oportunidades en conocimiento, salud, educación y desarrollo.

Lo que viene a ser la llamada “era digital” tiene un sinónimo inevitable: “la era de la información”. En ningún otro momento de la historia humana ha sido posible saber con tanta facilidad lo que está sucediendo en cualquier punto del planeta. Al contrario de lo que se podría suponer, el fenómeno creíble de internet, no solo ha traído beneficios a los medios de comunicación; en verdad ha impuesto desafíos monumentales. El mayor de ellos es que continúen siendo imprescindibles para sus audiencias, frente a la avalancha de noticias puestas en circulación por un sin número de agentes y de intereses muchas veces -la mayoría- inconfesables, de ahí la fake news. Para enfrentar este nuevo escenario, dat0s se vale de aquello que la transformó en la más influyente revista de Bolivia: el periodismo de excelencia en las diferentes plataformas que llevan su nombre. Reflexión y respecto de los hechos y sucesos de interés público sobre los poderes que mueven la sociedad están en el ADN de los reportajes de dat0s, que en su naturaleza interpretativa ofrece información y opinión. Es en ese norte que en la presente edición al avanzar el 2020, la revista ha identificado a 20 personajes que están al frente a un incuestionable y variadísimo campo de temas que hacen al futuro político, económico y social.

Revisando la historia de la revista, refrescamos al lector con un reportaje de febrero de 2007 cuando el Gobierno de la época se disponía a tomar el control del país de forma violenta – como luego se desencadenó su caída también violenta- en un estallido que estuvo a punto de derivar en una guerra civil. Los prolegómenos de esas acciones ya estaban en el tintero de nuestras ediciones con la misma valentía y entrega que caracterizó la acumulación de nuestra historia.

Una entrevista con el editor – socio de dat0s, el periodista Carlos Rodriguez San Martín que no se doblegó frente a los poderosos señalando el camino de la denuncia, fiel a lo que en ese momento se vivía en el cargado ambiente político de la época; este y otros momentos son apenas una señal de que no estuvimos equivocados; identificamos en todos los casos a los responsables de una historia que se enriqueció en el papel, hoy en nuestras plataformas digitales con el mismo empeño: ser confiables y creíbles con los miles de lectores que hemos ganado en estos 20 años. Y cómo no, a nuestros personajes de la cultura y las artes, descubrimos con el tiempo que la máxima que nos nueve en el plano ideológico es sencillo: al centro en la política, a la derecha en las finanzas y a la izquierda en la cultura. Esta trilogía de elementos hace que dat0s se convierta en una referencia en la cobertura de estos tres grandes campos de la información.

Durante estos 20 años y en curso la era digital, el conocimiento transmitido con responsabilidad y rigor es un activo fundamental para el ciudadano. Entregar tal tipo de contenido regularmente a sus lectores, representa la defensa incondicional a la democracia y la razón de ser de la revista.