El fundador de Telsa lleva desde 2014 prometiendo la llegada inminente de los coches que conducen solos. Y hace a penas unos días lo ha vuelto a decir: sus Teslas tendrán un sistema de piloto automático sin necesidad de supervisión humana “el año que viene”. Unos días antes había asegurado también que para esa fecha estará instalado en un millón de coches, 900.000 más de los que están usando la versión de prueba en la actualidad.
Como explica Drive Tesla, lo ha hecho ante un grupo de periodistas durante la visita que ha efectuado este fin de semana a Brasil. Musk, que ha copado titulares en todo el mundo en las últimas fechas por el anuncio de su compra de Twitter y las recientes acusaciones de agresión sexual, estuvo durante el fin de semana con Bolsonaro para cerrar un acuerdo por el que desplegará su internet por satélite, Starlink, en el Amazonas.
Igual este año acierta
Según los periodistas brasileños, Musk ha asegurado que por estas fechas del año que viene sus coches con piloto automático podrán circular sin la asistencia de un humano. Una afirmación que llega puntualmente cada año y que en algún momento se convertirá en realidad por pura estadística.
El ‘Full Self Driving’ (FSD) de Tesla recoge información de todos los conductores que lo usan para entrenar a la inteligencia artificial responsable del sistema. Hoy en día hay más de 100.000 personas en EEUU y Canadá que ya están usando la beta del FSD. Y, aunque todavía no está claro cuándo llegará a Europa, la compañía espera que esté instalado en un millón de coches antes del fin de 2022.
Esto significa que Musk ha cambiado de cantinela. Como apunta Electrek, hasta hace unos días el objetivo de la compañía era tener un millón de taxis autónomos en circulación para final de año, pero durante la cumbre ‘All-in’ celebrada hace una semana Musk aseguró que: “En este momento, la beta del FSD puede llevarte con cero intervención a través de la zona de la bahía [San Francisco], desde San José hasta Marín, a través de un tráfico complejo. Es realmente muy sofisticado. He invitado a cualquiera a unirse a la beta o a ver los vídeos de los que la usan. Tenemos más de 100.000 personas usando la beta, así que no es un número pequeño [de usuarios], y la ampliaremos probablemente a un millón de personas para finales de año”.
Aunque hasta ahora no lo ha hecho
Como ya contamos aquí, el director general de Tesla falla más acierta con sus predicciones. Todavía estamos esperando que sus coches autónomos nos lleven a la playa mientras dormimos, algo que dijo que pasaría “en dos años” durante una charla de TED celebrada en 2017.
Más tarde, en 2018, aseguró que al año siguiente sus coches autónomos serían entre un 100 y un 200 por ciento más seguros que los conductores humanos. Y el año pasado aseguró con rotundidad en el podcast de Lex Fridman que a estas alturas el FSD estaría en funcionamiento. Ha habido tantas declaraciones como esta a lo largo de los años que a alguien se le ocurrió juntarlas todas en un desternillante vídeo que se puede ver a continuación.
La realidad es que a mayo de 2022 los coches que llevan el paquete de piloto automático todavía requieren que un humano que esté pendiente tras el volante y aún existen dudas sobre la tecnología. El mismo Musk ha hablado de lo complejo que es poner en pie un sistema de piloto automático como el que han diseñado y lo ha comparado con el reto de crear una inteligencia artificial general que pueda pensar de manera similar a cómo lo hacemos los humanos.
Tesla, al contrario que su competencia, lo ha apostado todo a un sistema de cámaras que sirvan de ‘ojos’ para que su IA pueda llevar el volante y predecir y evitar posibles accidentes. Sin embargo, marcas como Waymo usan una combinación de sensores entre los que están los LIDAR, para hacerse una composición de lugar que les guíe en su conducción de manera segura. El camino que ha elegido Tesla es mucho más complicado en el corto plazo, pero cuando lo consiga podría tener un sistema sólido para muchos años. Su inteligencia artificial no solo se usará para que los coches puedan circular de manera autónoma, sino que también será el cerebro de sus robots humanoides. Un campo en el que tesla pone el 70 por ciento de su inversión en investigación y desarrollo. O por lo menos, eso es lo que dice Musk.