El objetivo de ‘blindar’ y generar seguridad a los obreros con el Seguro Obligatorio de Accidentes de la trabajadora y el trabajador en el ámbito de la Construcción (SOAT-C), según la Confederación Sindical de Trabajadores de la Construcción de Bolivia no cumple las expectativas, porque más del 90% de los trabajadores del sector no cuenta con su respectiva póliza.
A manera de comparación, hasta marzo de esta gestión, de los 2,2 millones de vehículos del parque automotor, el 57% ya contaba con el Seguro Obligatorio de Accidentes de Tránsito (SOAT).
El secretario ejecutivo de dicha institución, Valerio Ayaviri, explicó que, según el Instituto Nacional de Estadística (INE) en el país, hay unas 360.000 personas que trabajan en la construcción y según sus cálculos, menos de 30.000 cuentan con su SOAT-C.
Ayaviri indicó que esta situación se debe a que el sector se caracteriza por ser informal y los contratos laborales son temporales, un aspecto que a su criterio provoca un desinterés de los trabajadores para adquirir su póliza que de acuerdo con la norma vigente es obligatorio para ser contratado por las empresas constructoras.
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“Falta más información. Además, en la Ley 1155 hay puntos que no están bien claros. Es cierto que el costo del seguro corre por cuenta del trabajador, pero eso no está funcionando. Estamos trabajando con el Ministerio de Trabajo para que las empresas se hagan cargo de un 50% del valor del seguro”, explicó Ayaviri.
Sobre el tema, Javier Arze, gerente de la Cámara de la Construcción de Santa Cruz (Cadecocruz), señaló que las empresas constructoras del país son respetuosas de las normas por lo que constantemente se está recordando a sus afiliados que no pueden contratar trabajadores que no cuenten con el SOAT-C.
Arze precisó que todas las empresas cuentan con seguros de riesgo para sus trabajadores, pero remarcó que de acuerdo con las normas vigentes son los trabajadores los que deben adquirir las pólizas que tienen un costo de Bs 150 y una vigencia por un año.
Bajas ventas
La comercialización del SOAT-C comenzó mayo de 2021, pero el ritmo de las ventas no convence a la Autoridad de Fiscalización y Control de Pensiones y Seguros (APS), por lo que su directora, María Esther Cruz, mediante una carta del 4 de abril de 2022, dirigida a Justino Avendaño, gerente general de la Asociación Boliviana de Aseguradoras (ABA), hace notar que a pesar de la reactivación de la construcción la actual cobertura del seguro no tiene la misma dinámica por lo que pide a ABA que recuerde por escrito a sus asociados que es obligatoria la compra del SOAT-C.
Al respecto, fuentes del sector asegurador indicaron que, si bien la APS puede hacerles este pedido, es Univida S.A, empresa de seguros del Banco Unión, la que debe generar mayor publicidad y promocionar el seguro de forma agresiva y constante.
Según datos de Univida S.A., al 2 de junio de 2022, en el país se vendieron 28.361 SOAT-C. En este sentido, La Paz, con 9.830 (34%) de pólizas vendidas es la principal plaza, le sigue Santa Cruz, con 8.192 (28,8%) unidades comercializadas, más atrás Cochabamba, con 4.613 primas adquiridas.