La protesta militar en Bolivia gana respaldo ciudadano pese a las sanciones

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Foto: EFE

Evo Morales subraya la importancia de la disciplina militar y califica de traición a la Patria el abandono del servicio

Las duras medidas disciplinarias aplicadas a los militares bolivianos de bajo rango por el Comando en Jefe de las Fuerzas Armadas han fortalecido la protesta de suboficiales y sargentos con el creciente apoyo ciudadano, pese a que este viernes el presidente Evo Morales ha puesto énfasis en la disciplina militar, sin la cual la institución armada no puede existir.

Por cuarto día consecutivo, centenares de suboficiales y sargentosvestidos con uniforme de campaña de las tres armas, retornaron a las calles céntricas de La Paz junto a sus esposas y madres para reiterar su demanda de descolonización de las Fuerzas Armadas, cuyo Comando dispuso el jueves la baja inmediata de 702 militares del Ejército, de la Armada y de la Fuerza Aérea.

Aunque la manifestación ha sido pacífica, se registraron algunos momentos de tensión cuando un grupo de mujeres llegaron a las instalaciones de la Fuerza Aérea, en el centro de la ciudad, para tocar las puertas y solicitar que sus esposos se incorporen también a la protesta. Pero se retiraron poco después, convencidas de que las puertas iban a permanecer cerradas.

“Si no ha disciplina, no hay Fuerzas Armadas; si no hay doctrina del pueblo no hay Fuerzas Armadas”, ha afirmado el presidente Morales durante los actos preparados por el aniversario del Colegio Militar de Ejército en La Paz.

Morales ha enfatizado, en varias oportunidades, la importancia de la disciplina militar en aparente alusión al grave conflicto que enfrentan las Fuerzas Armadas con las protestas de cientos de efectivos de las tres armas a lo largo de toda la semana para que cesen la discriminación, la desigualdad y la exclusión.

El presidente aprovechó la oportunidad para recordar la enseñanza de sus superiores cuando le tocó estar bajo banderas. El abandono del servicio en las Fuerzas Armadas es una traición a la Patria, ha señalado Morales para, poco después, desmerecer la sugerencia, incluida en el proyecto de descolonización, de crear una Guardia Nacional.

“Cuando escucho convertir a las Fuerzas Armadas en Guardia Nacional me confundo. Explíquenme cómo es eso de convertir en una Guardia Nacional”, ha expresado en coincidencia con los criterios del ministro de Defensa, Rubén Saavedra, que descartó esa sugerencia como aquella otra petición de cambiar los grados de suboficiales y sargentos por el de oficial técnico, debido a que esa figura no existe en la Carta Magna.

Las esposas de los militares de baja graduación quedaron muy afectadas por las sanciones aplicadas a suboficiales y sargentos, que implica también un inmerecido castigo económico a las familias y, en especial, a los hijos en edad escolar. También lamentaron que otros militares están siendo destinados a las fronteras como medida disciplinaria.

Los programas de opinión en radioemisoras locales reflejan el creciente apoyo ciudadano a los militares de baja graduación, muchos de ellos hijos de indígenas aimaras del altiplano boliviano que aspiran a una mejor calidad de vida al servicio de su Patria.

La sede de Gobierno, con más de un millón de habitantes, tuvo un viernes muy difícil tanto por la protesta de los militares de baja graduación, que caminan por las calles en correcta formación y entonando himnos, como por la bulliciosa manifestación de los maestros urbanos que también ocuparon las céntricas avenidas para hacer conocer su rechazo a los nuevos programas de educación, que deprimen la enseñanza de materias básica a favor de otras de menor trascendencia en la formación de los niños