Crisis del agua podría llegar al 2017

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Foto: El Diario

El director ejecutivo de la Autoridad de Fiscalización y Control Social de Agua potable y Saneamiento Básico (Aaps), Víctor Hugo Rico, señaló que 2017 se perfila también con una tendencia de limitaciones, puesto que este año tiene de alguna manera conexión con la próxima gestión.

“2017 se perfila con una tendencia de limitaciones, porque no en vano hablamos de períodos anuales e interanuales, un año tiene de alguna manera conexión con el próximo año, porque el sistema climático en esta región del mundo es que la época de lluvias más persistentes es de fin de año y a inicios del próximo año. Por tanto, hay que tomar previsiones de informar a la población de manera oportuna”, dijo Rico en una entrevista televisiva.

SE MANTENDRÁ LA CRISIS

Por otro lado, la autoridad aclaró que las represas de Hampaturi, Incachaca, Milluni y Ajuan Khota están alimentadas por lluvias temporales, mientras que el Tuni Condoriri, que abastece al Sistema El Alto, está alimentado por corrientes de agua permanente, por los deshieles.

Explicó que la tendencia de acumulación de precipitaciones durante el año debe tener un promedio de 595 a 600 milímetros de agua en La Paz y sus alrededores más próximos, principalmente donde están las represas.

“En los 11 meses del año que llevamos ha llovido sólo el 10%, eso no nos da siquiera la esperanza que diciembre va a ser tan tormentoso que va a ver inundaciones, la tendencia se percibe en el campo y en el altiplano en general de que hay sequía.

Consiguientemente, no hay perspectiva de hablar de que haya una precipitación extrema”, dijo.

RACIONAMIENTO

Respecto al racionamiento que enfrentan vecinos de la ladera este y zona sur de La Paz, Rico manifestó que en mayo y junio de 2016 ya se tenía información que permitía prevenir de que había una tendencia, que podía tornarse crítica, lo que significa que en algún momento se tenía que anunciar a la población de que se venía medidas de mitigación.

En ese marco, explicó que el embalse del Tuni Condoriri está a una capacidad de 40 y 42% de su reserva, “ahí no hay mucho cuidado, sin embargo, tenemos que hacer seguimiento, si es que la situación se agrava con el calentamiento global, tenemos que pedirle al operador que tome medidas orientando a la población”, señaló.

AGUA TURBIA

Desde que empezó el racionamiento del líquido vital, vecinos de las zonas afectadas indicaron que el agua que sale es muy turbia, hecho que alarmó, principalmente, a las amas de casa, respecto a que ello es nocivo para la salud.

Al respecto, el director de la Aaps aclaró que se debe a que el agua se está conduciendo por unas redes muy antiguas, que tiene ciertas incrustaciones que se remueven debido al mecanismo de cerrar y vaciar la tubería por los turnos de racionamiento, pero que la misma no representa ningún riesgo para la salud.

TRASVASE

Rico dijo que, en general, dependemos de las lluvias, ya que es el factor principal para tener reservas. “Los trasvases que se están haciendo es para mantener algún nivel de reserva en estas represas, cuya situación es crítica”.

“La proveedora está ejecutando un trasvase de la cuenca de Palcoma, estamos motivando unas negociaciones que permitan acudir a un caudal adicional, para ello estamos viendo la conveniencia de dejar un espacio para mañana (hoy) y abordar una nueva solicitud a la comunidad rural para que nos permita incrementar ese caudal, esperamos que permitan a Epsas ejecutar este adicional, bajo el argumento que ellos también tienen familias que están siendo afectadas con el racionamiento”, manifestó.

EXPERTO

Por otro lado, el analista y educador socioambiental del CDS Molle Edwin Alvarado, en contacto con EL DIARIO, coincidió con la autoridad del agua, en sentido de que en 2017 no hay muchas esperanzas para los paceños, porque no se habrá cambiado aún las matrices de distribución de agua potable, que ocasionan que un 45% de las aguas potabilizadas se pierdan antes de llegar hasta sus usuarios.

“Para que la población entienda: si no fueran por la fugas y filtraciones, hoy tendríamos agua para seis meses más, antes de sufrir racionamientos o cortes de agua. Así de grave es este tema y en esa medida requerirá comprensión e inversión prioritaria”, dijo.

Asimismo, señaló que no se contará aún con una nueva y muy necesaria represa en Hampaturi, que debe almacenar las aguas excedentes del período de lluvias en la cuenca, porque hasta ahora todos los años ha llovido hasta que las represas rebalsen abundantemente en febrero.

Lamentó que el imparable proceso de deforestaciones en Bolivia (orientado a la agroindustria y la coca) concurre con el cambio climático en sinergias negativas, que hacen que nadie pueda asegurar con precisión cuándo lloverá, en qué períodos de tiempo, en qué cantidades o con qué intensidades.

CAUSAS EN BOLIVIA

“No es un problema de países desarrollados o contaminación industrial solamente. También hay un problema de cambio de uso de suelos, tala, quema y otros que desequilibran el régimen hidrológico, y en eso en el país vamos bastante mal”, lamentó.

Finalmente, señaló que la ciudadanía no asume aún su responsabilidad, sea por ignorancia de la problemática y de la escasez de agua dulce disponible libre de contaminación del planeta o por desprecio, porque todavía muchos piensan que tienen “derecho” a derrochar agua, debido a que pagan por su consumo.

“No se han librado normas y sistemas de control rigurosos para garantizar su cumplimiento en los aspectos de: castigar con tarifas altísimas los usos suntuarios y lucrativos del agua (lavado de autos en lavaderos, concesiones a las empresas mineras y porque no se ha prohibido el uso de la manguera para lavado de autos, aceras, jardines y patios). Debiera imponerse multas escarmentadoras”, apuntó.

Aseguró que debe priorizarse esfuerzos e inversiones hacia estos temas estratégicos, de manera que garanticen seguridad de acceso al agua potable (y no como la que se recibe hoy, turbia, fétida; con sulfatos ferrosos y coliformes fecales).

“Se puede afirmar categóricamente que hoy no solo tenemos cortes de agua en los domicilios; sino que cuando hay agua, se la recibe contaminada, arriesgando la salud comunitaria”, afirmó.

 

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