Paloma Picasso, la mayor sucesión artística del mundo

Por Agencias con dat0s
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Paloma Picasso

A sus 74 años, se hará cargo de la entidad que tiene el monopolio de los derechos de autor y reproducción de las obras del artista español, así como los derechos de marca. Empresaria y diseñadora de perfumes y joyas, tuvo una infancia turbulenta marcada por el abandono del padre.

Paloma Ruiz Picasso la última sobreviviente de los cuatro hijos de Pablo Picasso (1881 – 1973) es ahora la nueva administradora de la herencia que gestiona los derechos vinculados al artista y su obra, en sustitución de su hermano Claude. El abogado, Jean-Jacques Neuer, dijo a principios de esta semana que su llegada al frente de la sucesión artística más importante del mundo fue “muy importante para el mundo del arte”.

La Succession Picasso, que ostenta el monopolio de los derechos de autor y de reproducción de las obras del maestro, pertenece de forma indivisa a Claude y Paloma Picaso y a los nietos del artista, Marina Picasso, Bernard Ruiz-Picasso y Olivier, Diana y Richard Widmaier-Picasso. Claude Ruiz-Picasso, de 76 años, quien había sido director desde 1989, quería hacerse a un lado en favor de su hermana, dijo el abogado.

Entre las atribuciones de la entidad figuran la gestión de los derechos de la personalidad, el derecho moral y los derechos de marca, la autentificación de obras y la lucha contra falsificaciones mediante acciones judiciales y estos últimos años consiguió recuperar 271 dibujos en poder de un antiguo electricista del artista, que aseguraba haberlos recibido de regalo de la viuda de Picasso.

Quién es Paloma Picasso

Empresaria, fashionista y diseñadora de perfumes, complementos y joyas, Paloma Picasso, de 74 años, es hija del pintor español y de la artista francesa Francoise Gilot, fallecida en junio.

Gilot tenía 21 años y era una pintora en ciernes cuando conoció a Picasso, que era 40 años mayor que ella y estaba casado con la bailarina rusa Khokhlova, en la Francia ocupada durante la Segunda Guerra Mundial. En el momento del encuentro también era amante del fotógrafo, pintor y poeta francés Maar.

Amantes durante 10 años, nunca se casaron pero tuvieron dos hijos, un hijo, Claude, nacido en 1947, y una hija, Paloma, en 1949. Su padre influyó en su elección de nombre, siendo Paloma el símbolo que diseñó para el Congreso Mundial de Partisanos por la Paz el mismo año en que ella nació.

Francoise abandonó al pintor en 1953 y en su libro de 1964 “La vida con Picasso”, lo retrató como “un ser tiránico, supersticioso y egoísta”. En el libro relató la reacción de Picasso cuando ésta le comunicó su intención de dejar la relación. “¿Te crees que alguien va a interesarse por ti? Jamás lo harán sólo por ti: incluso las personas que crees que te aprecian, sólo será una especie de curiosidad por una persona cuya vida rozó la mía tan íntimamente”, le dijo.

El artista español fracasó en un intento legal de prohibir el libro y tomó represalias negándose a verla a ella y a sus hijos durante años.

“Mucha gente que conocía dejó de saludarme. Aprendes lo que es la vida muy, muy joven. Y ya no pude ir a ver a mi padre”, una experiencia “muy dolorosa”, recordó su hija en la entrevista. “No era un libro contra Picasso, ella humanizó a Picasso, era algo positivo porque para mí esa imagen de dios todopoderoso (…) lo convertía en alguien menos interesante”, puntualizó.

Paloma, para quien llevar el apellido Picasso es “una herencia pesada pero llena de amor”, según reconoció en una entrevista, comenzó su carrera en el mundo de la moda en París en 1968. En 1984, creó el muy exitoso “Paloma” para L’Oréal, que se convirtió en un clásico en el mundo de la perfumería y en las siguientes décadas diseñó joyas para Yves Saint Laurent y Tiffany & Co.

Su madre, una asidua clienta de alta costura de Pierre Cardin y Madame Grès, también la ayudó a introducirse en el mundo de la alta costura y, después de sus estudios universitarios en París, comenzó a trabajar como diseñadora de vestuario para Les Folies Bergères, inclinándose cada vez más por el diseño de joyas.

La joyería, dijo en una entrevista con The Telegraph, fue “realmente mi primer amor”. “Era muy marimacho cuando era niña, cada vez que tenía que usar un vestido, lloraba. Pero ves fotos mías de niña y estoy usando joyas, a menudo estoy usando un brazalete o aretes. Siempre me atrajeron las joyas”, agregó.

“Antes de empezar a diseñar joyas, en cierto modo me diseñaba a mí misma. Pasaba mucho más tiempo tratando de averiguar qué me iba a poner, qué cabello iba a tener…”, relató.

Paloma se casó en 1978 con el argentino Rafael López Cambil, de quien se separó en 1995 y con el que protagonizó uno de los divorcios más caros de la historia. Volvió a casarse, esta vez con el ginecólogo francés Éric Thévenet.

El “imperio Picasso” vale miles de millones de dólares

Pablo Picasso, autor de un legado de 120.000 obras de arte, falleció el 8 de abril de 1973 en el sur de Francia, dejando cinco herederos, entre ellos a Paloma y sus hermanos Maya Ruiz-Picasso (hija de Marie-Thérèse Walter, quien se suicidó en 1977) y Paul (hijo de la bailarina Olga Khokhlova), quien también se mató en 1975.

A todos ellos Picasso les legó una inmensa fortuna y 45.000 obras entre pinturas, dibujos, cerámica, esculturas, libros ilustrados, planchas de grabado y tapices, además de dos castillos, tres casas, millones en dinero y lingotes de oro.

Cincuenta años después de su muerte en abril de 1973, el artista que pintó “Guernica” y “Les Demoiselles d’Avignon” sigue inspirando. Museos de todo el mundo, especialmente en Francia y España, tienen planeadas unas 50 exposiciones este año dedicadas a su legado.

Picasso es el más cotizado en las subastas del mundo entero y sus ventas sobrepasan los US$ 4.700 millones en la última década, según datos de la firma de análisis francesa Artprice, que lo ubican antes que el estadounidense Andy Warhol (US$ 3.400 millones) y el francés Claude Monet (2.600 millones).

Cinco obras de Picasso superaron los US$ 100 millones en subastas realizados en los últimos años: 16 más de 50 millones y 39 más de 30 millones. El cuadro más caro hasta la fecha es «Las mujeres de Argel (Versión O)», de 1955, que fue vendido el 11 de mayo de 2015 en US$ 179,4 millones.

En las dos décadas previas, otros dos cuadros de Picasso habían batido récords mundiales: “Muchacho con pipa” (US$ 104,2 millones) en mayo de 2004, y “Desnudo, hojas verdes y busto” (106,5 millones) en mayo de 2010. A lo largo de diez años, un promedio de más de 3.000 obras fueron adjudicadas anualmente, es decir 31.745 ventas.