Lewis vs Max, el ganador se lleva todo

Tras la victoria de Max Verstappen que le valió el Campeonato Mundial de F1 de la temporada 2021, las polémicas continúan rondando amenazantes desde los boxes silenciados del equipo Mercedes que, hasta el incidente en el giro 53 de los 58 programados, festejaba anticipadamente el campeonato. En condiciones normales era casi imposible que Max descontase en los últimos cinco giros la diferencia de 10 segundos que lo separaba de Lewis, para colmo con cinco coches rezagados que se interponían entre el Mercedes de Hamilton y el Red Bull de Verstappen.

Fue una carrera impecable la que corrió el británico hasta el momento en el que Nicholas Latifi sufrió un accidente en la vuelta 53, provocando el coche de seguridad. La salida del safety car le dio la oportunidad a Max de entrar a boxes para cambiar sus neumáticos y montar blandos nuevos, mientras que Lewis siguió en pista y se quedó con unos duros muy desgastados.

Con una batalla en la que el piloto que terminase por delante se llevaba el título, a Red Bull le interesaba que la carrera se reiniciase y que los coches que tenían una vuelta perdida y estaban intercalados entre Hamilton y Verstappen, pudiesen ser desdoblados permitiendo el adelantamiento Max.

“Los coches rezagados no tendrán permitido adelantar”

Así que cuando Micky Masi, comisario de la competencia, emitió un aviso diciendo “los coches rezagados no tendrán permitido adelantar”, parecía que las esperanzas de título de Red Bull se habían esfumado, ya que era poco probable que Max pudiera superar a los cinco coches rezagados que tenía delante y al propio Hamilton en una sola vuelta. Sin embargo, la situación cambió drásticamente en la penúltima vuelta, cuando Masi consideró que la pista era lo suficientemente segura como para dejar que algunos coches doblados adelantaran a Hamilton y al coche de seguridad.

Fue la forma en que se manejó la última carrera del año, y el reinicio inmediato, lo que molestó mucho a Mercedes. El mal humorado Toto Wolff gritó “no Mickey, no”. Entretanto, Lewis atinó decir por los micrófonos del equipo, “esto está siendo manipulado”. Mercedes entendía que no se debió retirar al safety car en la última vuelta. Fue eso lo que le permitió al neerlandés tener una última oportunidad con gomas nuevas, de quedarse con la victoria como finalmente ocurrió.

Las reglas del coche de seguridad

La protesta de Mercedes se centra en dos aspectos de las normas: el artículo 48.12 y el artículo 48.8 del Reglamento Deportivo de la F1. El artículo 48.12 se refiere a la situación de que los pilotos doblados (rezagados) recuperen una vuelta perdida.

En un principio, Masi estaba en su derecho de declarar que “los coches con una vuelta perdida no tendrán permitido adelantar”, lo que significaba que Verstappen quedaría atrapado detrás de cinco pilotos antes de que pudiera llegar a Hamilton. Sin embargo, en la penúltima vuelta, en la bajada de la curva 9, Masi envió un mensaje diciendo que cinco coches – Lando Norris, Fernando Alonso, Esteban Ocon, Charles Leclerc y Sebastián Vettel- podrían recuperar la vuelta perdida.

La decisión de permitir que sólo algunos coches tuviesen esa posibilidad es muy inusual, ya que el artículo 48.12 sugiere que el mensaje de “los coches doblados ahora pueden adelantar” debe enviarse a todos los competidores que están en esa misma situación. El reglamento también es explícito en cuanto a cuándo se puede reiniciar la carrera: “A menos que el director de la carrera considere que la presencia del coche de seguridad sigue siendo necesaria, una vez que el último coche doblado ha pasado al líder, el Safety Car volverá a los boxes al final de la siguiente vuelta”.

“Si el director de la carrera considera que las condiciones de la pista no son adecuadas para el adelantamiento, se enviará a todos los competidores el mensaje ‘No se permite adelantar’ a través del sistema oficial de mensajería”. Según Mercedes, dicha cláusula sugiere que como el mensaje para que los doblados adelanten salió en la vuelta 57, entonces la reanudación sólo podría haberse dado al final de la “vuelta siguiente”, es decir, la vuelta 58, que era la última de la carrera.

El artículo 48.8 se refiere a la prohibición de adelantar detrás del coche de seguridad. En los instantes previos al reinicio, mientras Hamilton y Verstappen se preparaban para comenzar la carrera de nuevo, pareció desde la cámara onboard que el Red Bull había adelantado brevemente al Mercedes.

La regla dice que “ningún piloto puede adelantar a otro coche en pista, incluido el propio coche de seguridad, hasta que pase la línea (véase el artículo 5.3 – qué es la línea del coche de seguridad) por primera vez después de que el Safety Car haya regresado a boxes”.

Ambos asuntos se tratarán en la sala de comisarios de la FIA el domingo por la noche de Abu Dhabi.

Así terminó una de las temporadas más espectaculares que regaló la Formula 1. “Hubiera sido decepcionante que la última carrera en la que los dos primeros llegaban empatados en puntuación terminará con un coche de seguridad. Son las cosas mágicas que nos regala el deporte”, aseguró emocionado, el periodista Fernando Tornello, la voz de la F1 de la cadena ESPN.