Nuevo carnet de identidad incluye utoidentificación étnica

El director del Servicio General de Identificación Personal (SEGIP),  Marco Antonio Cuba,  presentó  el  nuevo prototipo de la cédula de identidad en la que se incluye la autoidentificación con una de las naciones o pueblos  indígena originario  campesinos, y también elimina el estado civil y la profesión u ocupación.

El cambio causó el rechazo inmediato en las redes sociales.

“(Es necesario que se) porte un documento de identidad legal y vigente de las naciones y pueblos indígena originario campesinos para renovar sus cédulas de identidad y en las mismas se va a ver plasmado la nación o la autoidentificación cultural. Este es un derecho individual de las personas, por si acaso, el cuál se va a ver plasmado en su documento de identidad a partir del día lunes”, declaró  Cuba a BTV, ayer.

Las personas, cuando renueven sus cédulas,  decidirán si se inscriben como aymaras, quechuas u otros, pero si no lo quieren, esa información no estará en el documento,  aclaró.

El diputado Franklin Flores (MAS) valoró la incorporación de la autoidentificación étnica. “Me parece importante”, recalcó y  recordó el  Capítulo IV de la CPE donde se establece que las Naciones y Pueblos Indígenas Originario Campesino tienen derecho a la   “identidad cultural de cada uno de sus miembros, si así lo desea, se inscriba  en su cédula de identidad, pasaporte y otros documentos de identificación con validez legal”.

Lo que no incluye la nueva cédula es la profesión, ocupación y el estado civil. Cuba dijo que estas dos características no hacen a la identificación de la persona.

Sin embargo, el senador Edwin Rodríguez (UD) calificó de “absurdo” el hecho de que la autoidentificación étnica sea más importante que el estado civil y la profesión. “El mayor porcentaje de la gente no se autoidentifica así, el sentimiento del país es boliviano”, afirmó.

Su colega Lourdes Millares (UD) se declaró sorprendida al saber del nuevo documento, que rechazó de inmediato. “Vamos a pedir una explicación al SEGIP para que nos diga en qué se fundamentó para hacer  este nuevo diseño, porque deja atrás valores importantes”, aseguró.

A pesar de que este documento tendrá un chip en el que se incorpora información de la  huella dactilar y facial, y que será “difícil de clonar”, la gente lo rechazó a través de las redes sociales.

“Para qué distinguir si somos quechuas o aymaras, ¿quién es de raza pura?, yo soy boliviana”, escribió Rosmery Gutiérrez.

Algunos sugieren recolectar firmas para que opinen sobre dicho documento, pero la  gran mayoría rechaza la idea de suprimir la profesión y el estado civil y lo atribuyen al engaño del vicepresidente Álvaro García Linera sobre su presunta profesión.

En la página del SEGIP hay una encuesta que fue publicada en 2012 en la que se pregunta a los consultados sobre si quieren o no que estén ciertos datos en su documento de identidad, pero no se pregunta por la profesión.