Daniel Ortega jura su cuarto mandato con 36 opositores detenidos

0
761
Nicaragua, Daniel Ortega,
Foto: Reuters

El presidente de Nicaragua, Daniel Ortega, jura este lunes por cuarta vez consecutiva su cargo tras unas elecciones sin competencia después de encarcelar a sus potenciales oponentes. La mayoría de ellos está en El Chipote, prisión que se ha convertido en piedra angular de una represión que suma 170 presos políticos.

Condiciones infrahumanas

Varios testigos, familiares y los abogados de los detenidos han señalado que permanecen en condiciones infrahumanas detenidos en El Chipote. La pésima alimentación que reciben está haciendo estragos en la salud de los detenidos.

El diario español El País reportó en su edición del domingo que, por ejemplo, Violeta Granera ha perdido varios dientes porque la comida que le proporcionan en prisión es muy dura. La lideresa opositora lleva más de 120 días sumida en una celda oscura y la falta de sol le ha provocado manchas rojas en su rostro.

El mismo diario señala que los centinelas policiales se burlan de los presos políticos como ella en estos primeros días de 2022. Su “jefe supremo”, quien dio la orden de detenerlos, Daniel Ortega, se impondrá este lunes 10 la banda presidencial de Nicaragua tras unas elecciones en las que no tuvo ningún tipo de competencia después de detener a sus principales oponentes.

Daniel Ortega

Con su nuevo mandato, al que llega sin reconocimiento internacional y de la mano de su esposa y “copresidenta”, Rosario Murillo, sella una etapa de represión y persecución por la que mantiene a 170 presos políticos. 36 de ellos —las principales figuras opositoras de Nicaragua— están encerrados en El Chipote donde, según las denuncias de familiares que han conseguido visitarlos muy esporádicamente, están sufriendo desnutrición, malos tratos y apenas tienen acceso a sus abogados.

Mientras que, en otras cárceles, opositores mantienen detención en condiciones lamentables. El País informó que Roger Reyes, un abogado critico a la pareja de mandatarios fue arrojado en noviembre en una celda de confinamiento cerrado, que se ha convertido según su esposa, en un laberinto de depresión y ansiedad.