Las exequias fúnebres del MAS-IPSP

Con la decisión, un millón de personas abandonarían el MAS.

Hay quienes dicen entre los allegados del expresidente que con la renuncia de Evo, el partido que lideró durante 27 años, puede considerarse un cadáver político por el desgaste del actual presidente Luis Arce. Los mismos voceros de Evo (entre ellos una trinchera cerrada de exministros) afirman sin sonrojarse que todos los procesos en contra del ex mandatario son inventados y que se presentará a las elecciones. Están seguros de lograr su objetivo, a pesar de su inhabilitación como candidato por procesos pendientes en la justicia y porque legalmente la constitución impide su reelección.

Haciendo a un lado cualquier aspecto legal que condicione su postulación, el circulo de hierro de Morales tiene entre sus metas ese objetivo: Postularlo a la presidencia en las elecciones de este año con la sigla Frente Para la Victoria (FPV). Es la única tarea en la que están abocados para devolverle una especie de revancha que debe cobrar factura a la traición de Arce.

Parece un chiste, pero no, están hablando en serio. Aducen que no dejarán en manos de Andrónico Rodriguez el futuro porque es inexperto y, además, porque los errores no se cometen dos veces. En ese escenario los allegados a Evo apuestan a su candidatura para reforzar la capacidad de arrastre que según ellos aún mantiene el expresidente entre las capas sociales más humildes con un electorado duro que podría alcanzar una votación de hasta el 25%.

La renuncia al MAS

El MAS-IPSP es un caso es de estudio, se trata de un partido político que como el mismo García Linera sostuvo alguna vez ha sido un instrumento que ha permitido un gran lineamiento de sectores de la población; las mayorías silenciosas (cientos de organizaciones) que hasta antes de su formación votaban por una diversidad de partidos, sin encontrar el espejo de su realidad a la hora de depositarlo en las urnas. Pero eso podría haber cambiado y su desintegración llevaría a la polarización de los extremos.

En este panorama incierto para las elecciones de agosto ayer Morales (2006 – 2019) renunció al Movimiento Al Socialismo (MAS), el partido que lideró durante 27 años y con el que gobernó el país durante 14 años, informó su exministra y aliada, Teresa Morales.

La exministra reconoció que esta decisión marca una ruptura definitiva con la organización política que el mismo Evo Morales fundó y con la cual llegó al poder. Enfatizó que la decisión responde a la disputa interna que ha dividido a la militancia y a la pérdida del control del partido en manos de sectores afines al actual presidente Luis Arce. La renuncia de Morales ocurre en un contexto de crisis interna, con la validación de Grover García como presidente de la organización por el Tribunal Supremo Electoral (TSE), tras un fallo del Tribunal Constitucional Plurinacional. García, elegido en un congreso celebrado en mayo de 2024 en El Alto, representa la facción oficialista liderada por Arce, lo que profundizó la fractura en el partido.

Según la exministra Morales, se espera que alrededor de un millón de personas abandonen el MAS, lo que debilitaría considerablemente la estructura del partido. “Evo Morales no tiene ningún cargo público y ha mandado ayer (lunes), a través de un delegado, su renuncia al MAS-IPSP”, dijo a los periodistas la exintegrante del Gabinete del líder aimara.

Evo Morales busca participar de las próximas elecciones presidenciales

El expresidente anunció el jueves pasado su candidatura para las elecciones presidenciales del 17 de agosto de este año, junto al partido Frente Para la Victoria (FPV), con el que selló una alianza estratégica, a pesar del obstáculo legal que enfrenta su postulación.

Sin embargo, un fallo del Tribunal Constitucional Plurinacional de diciembre de 2023 prohíbe su participación en los comicios, lo que fue ratificado por el TSE. La decisión de Morales de postularse con otra sigla abre una nueva fase de confrontación política. Su candidatura, aunque anunciada, sigue en la incertidumbre debido a las restricciones constitucionales vigentes.