Bolivia: Una sola promesa obliga a Chile a negociar
Dejó establecido que el fondo de la demanda no es el Tratado de 1904 ni ponerlo en tela de juicio sino que Chile negocie una salida soberana al mar con base en las posibilidades que abrió ese país en reiteradas oportunidades, como testimonian los documentos.
Bolivia aseguró hoy ante la Corte Internacional de Justicia (CIJ) que una sola de las 15 promesas de Chile, de otorgar una salida soberana al mar, crea la obligación de cumplir con sus compromisos hechos voluntariamente a lo largo de más de un siglo.
“Uno solo de estos compromisos bastaría para crear una obligación”, dice el abogado Payam Akhavan, de la delegación boliviana, en la dúplica de los alegatos que hoy concluyeron en La Haya.
Afirmó que “la teoría de Bolivia es que hubo diversas instancias en las que hubo negociaciones con Chile”.
La posición boliviana fue reforzada por el vocero de la demanda boliviana, Carlos Mesa, a la salida de la CIJ. “Los abogados contestaron con claridad la pregunta del juez de la Corte y establecieron con claridad el proceso claro que marca la obligación de Chile de una obligación para entregar un acceso soberano al mar”, dijo.
El profesor Remiro Brótons, de la delegación boliviana, afirmó que el fondo de la demanda boliviana no es el Tratado de 1904 sino el cumplimiento de las promesas de chile referidas a una salida soberana al mar.
“La obligación de negociar no se basa en el Tratado de 1904, sino que se basa en bases distintas al Tratado de 1904”, dice el abogado Brótons. “Para fundamentar la obligación de negociar basta con decir que esta obligación estaba vigente a la hora de presentar la solicitud a la Corte”, añadió.
Bolivia espera que se haga justicia
El canciller David Choquehuanca afirmó que, tras los alegatos que culminaron hoy en La Haya, Bolivia espera ser escuchada y que se “hará justicia”. “Queremos valorar que las Naciones Unidas hayan construido una instancia de solución de controversias como es la Corte Internacional de Justicia. Queremos agradecer al presidente de la Corte y a los jueces por abrirnos las puertas de la justicia, retornamos con la esperanza y con la seguridad de que se hará justicia”, añadió.
El canciller de Chile, Heraldo Muñoz, se retiró sin aceptar preguntas de la prensa. “Luego de volver a Chile informaremos a la Presidenta de la República -Michelle Bachelet- lo que ha sido este trabajo”, dijo.
La fuente está en el ofrecimiento chileno
La jurista francesa, Monique Chemiller-Gendreau, de la delegación boliviana, que empezó hoy los alegatos del segundo turno, afirmó que la fuente jurídica boliviana de su demanda en la Corte Internacional de Justicia de La Haya, para que Chile negocie una salida soberana al mar, proviene de las posibilidades que abrió ese país en reiteradas oportunidades, como testimonian numerosos documentos, y ratificó que no se pretende poner en tela de juicio el Tratado de 1904.
Explicó que hay que entender ese litigio, ese diferendo, en su contexto histórico de la situación resultante del Tratado de 1904, “situación que revistió un carácter de injusticia, reconocido permanentemente y ampliamente desde entonces”.
“Si hay hoy un diferendo entre Chile y Bolivia, es un diferendo muy especifico, porque en este caso muy concreto Chile ha reconocido desde la firma del tratado que el mismo dejaba una cuestión pendiente de solución y que se había declarado dispuesto a encontrar esa solución.
Si el propio Chile no hubiese abierto otra vía para hacer posible la corrección de la injusticia que determinaba ese tratado Bolivia se hubiese visto obligada a no hacer nada”, sustentó. En esa línea, Chemiller-Gendreau afirmó que Chile no puede volver a escribir la historia y ratificó que ese país multiplicó las promesas, se comprometió en una serie de instrumentos, “y ha hecho nacer lo que en derecho se llama legitimas expectativas”.
La jurista francesa afirmó que “y si se preguntan dónde está la fuente jurídica de lo que plantea Bolivia. La fuente de ese derecho está en el comportamiento de Chile”.
A reglón seguido, aseveró que lo que pide Bolivia es que ese alto tribunal oriente a los dos estados en cuestión, que sea en esa vía de derecho que encuentre una solución efectiva. “Bolivia se apoya entonces, en primer lugar, para hacer valer su planteamiento en el respeto de la palabra dada, no en el Tratado de 1904, que nada tiene que poner en tela de juicio, sino haciendo referencia a los numerosos compromisos de Chile de dar a Bolivia una salida soberana al mar con independencia de ese tratado”.
A su juicio, Chile no puede permanecer en la contradicción de las numerosas oportunidades que negoció un acceso soberano al mar, independientemente del Tratado de 1904. Ratificó que Bolivia lo que ha hecho es ir por la vía del derecho y pidió a los magistrados hacer valer esa posibilidad.