Los candados con el FMI y las farmacéuticas

Otro tema de atención que ha pasado en medio de declaraciones y contradeclaraciones es la devolución del préstamo que la administración del Gobierno transitorio gestionó entre bombos y platillos con el FMI por US$ 327 millones. Se dijo entonces que los organismos de asistencia financiera destinaban recursos a tasas preferenciales para atender la emergencia sanitaria, pero resulta que no había sido así. Más allá del asunto ideológico que el Gobierno enfrenta con el Fondo, con el mismo rigor debiera obrar con las imposiciones inaceptables de las Multinacionales de la Industria Farmacológica, sector al que se le atribuyen ganancias similares al comercio de armas.

Es el caso de la relación de la actual administración con las farmacéutica hindúes y chinas que serán favorecidas con los lotes de vacunas que comenzarán a llegar a Bolivia. Se pierde en algunos casos el corte independentista que reclaman unos de otros, que sencillamente dejan al ciudadano de a pie con la misma sensación de que lo que aquí importa son los juegos de poder y las reglas que se decretan con el mismo complejo de inferioridad con la que las élites manejan asuntos de interés general.

Y para que esto quede claro, el MAS ha anunciado un proceso contra la candidata a la alcaldía de El Alto Eva Copa porque como presidenta del Senado franqueó el ingreso del préstamo del FMI. Se la acusa de traición, olvidándose que fue una de las pocas dirigentes del MAS que luchó para que otras tantas imposiciones foráneas no se aplicarán a raja tabla en el Gobierno de transición.